Conocernos e identificar nuestras propias debiliades y fortalezas nos permite ver la vida desde otra postura.
Puede ocurrir que cuando nos abrimos a alguien -antes o después- se despierten nuestras heridas, inseguridades, corazas y carencias más profundas.
El no abordar adecuadamente estas dificultades, provoca conflicto,enfermedades, desconfianza, resentimiento, lucha de poder, aislamiento o dependencia, saboteando la amistad, el amor y la intimidad.
Toma conciencia y atrévete … amate, confia y crece